Es el rechazo.
Es el rechazo. Es el amor perdido y la soledad involuntaria: cuando te arrinconan, y te atan, sin poder dejar que tu alma hable, que tu corazón exhale, que tu boca suspire. Es todo lo que se va, pero más lo que se queda. Es lo que se queda esperando al autobús a las 2 de la mañana y te acuchilla el pensamiento. Cuando sangras la herida a lentas lágrimas que se oscurecen en el frío. ..y vuelve la impotencia, la nostalgia, la incredulidad, las hojas y los ayeres que se van en una lluvia de besos callados. Es sentir sin actuar. Callar sin besar. Morir sin besar. Es morir ahogado de dolor y con palabras enmarañadas en la garganta.